¡Hola multicubano!

«La Habana es La Habana y lo demás son áreas verdes»… Es probable que, al menos alguna vez, hayas dicho o escuchado esta frase. Y es que suele utilizarse con cierta ironía para destacar la importancia y singularidad de la capital cubana por encima de las demás provincias.

Pero, ¿sabes cómo surgió la tan popular expresión? Si no es así, quédate hasta el final porque hoy te lo cuento y de paso, te traigo detalles de cómo sorprender a tu gente en Cuba, sin importar el rincón de la isla donde vivan.

Sin mantenerte mucho más en tensión debes saber que la famosa frase es una variante de «La Habana es Cuba y lo demás son puras marquesinas», que se originó en la década de 1950 durante el gobierno del presidente Fulgencio Batista, cuando esta ciudad experimentó un gran auge económico y cultural.

Para entonces muchas personas de todo el país se trasladaron a ella en busca de trabajo y oportunidades, lo que llevó a una concentración de poder y riqueza en la capital y que también contribuyó a hacer de La Habana una de las ciudades más importantes y prósperas de América Latina.

En esta época, era conocida por su arquitectura colonial y su vibrante vida cultural, y se consideraba el centro político y económico del país. En este contexto podríamos pensar que surgió como una forma de expresar la importancia de la ciudad en comparación con otras partes de la isla.

Y por si también desconoces, en la arquitectura, una marquesina es una estructura que sobresale de la entrada de un edificio y proporciona protección contra la lluvia o el sol. Por lo general, está construida con materiales resistentes como el metal o el vidrio y puede ser decorativa o funcional.

A pesar de su origen incierto, la frase ha sido popularizada en la cultura cubana a través de la literatura, la música y otras formas de expresión artística. Además con el tiempo, se ha modificado y se ha convertido en una especie de broma entre los cubanos.